27 de enero de 2010
JNSR: Mi DIOS, mi DIOS único y verdadero, Tú Señor Jesucristo, que formas con Padre y el Espíritu Santo, "un solo DIOS", Tú, mi DIOS de AMOR que dijo: "ustedes serán odiados a causa de Mi Nombre", hoy, como ayer, Tus amigos sufren contigo, porque Tu pena será siempre la nuestra.
Nosotros debemos seguirte porque, sólo Tú, en este mundo tan cambiante, eres y serás siempre nuestro camino porque tienes la Verdad. Y te digo, como dijeron todos los Apóstoles que te siguieron: "a quien iríamos, Señor. ¡Tu eres la Voz, la Vida, la Verdad!"
Todavía nos alumbras en estos Tiempos tan sombríos. Tu Luz nos dará siempre a proclamar, por todas partes dónde están las tinieblas, esta Santa Verdad que nos hará "Los Testigos de Tu Reino" al mismo tiempo que somos "los Testigos de Tu Cruz" Tu Verdad nos salva.
JESÚS: Yo abro delante de ustedes el camino que ya conduce al Reino de Dios.
Las zarzas y las espinas jamás impedirán a nadie perseguir su camino siguiendo Mis pasos. El viento plegará la caña, hará bajar la cabeza de los grandes árboles, se hundirá la cima de los montes y hará desviar los ríos, pero, jamás obstruirá Mi camino, y Mi Palabra estará siempre en este vuelo de palomas que les seguirá y que les señalará el camino.
Sí, habla de este último ataque del enemigo que se cuela en las religiones para interferir en el curso de Mi Santa Verdad con esta religión inventada por pedazos y esta otra que se remonta del fondo del tiempo.
Todo se renueva en Jesús Cristo.
El Señor DIOS, el Eterno, dijo a todos Sus Patriarcas, que un día, vendría sobre la tierra, el Enviado del Padre que es el "Hijo de DIOS". Es la Palabra viva del Padre y el Camino que deberán seguir todos los Pueblos, porque es la Luz del mundo.
Vendrá para vencer las tinieblas, traer el Conocimiento sobre toda Tierra y dar el Reino de Dios a todos los que Lo reconocerán como "Salvador de los Hombres".
Su NOMBRE es Jesucristo. Es el Emmanuel que viene para llevar a todos los Hombres al único camino que comenzó con ABRAHAM y lo prosiguió Él.
Es Él quien perdonó al Hombre muriendo en Su Santa CRUZ de AMOR y que le salvó.
Él es Nuestro Salvador. Es el camino que nos conduce al Padre de toda Bondad.
Todos los Hombres, toda confesión, toda raza, son llamados a seguirLo para vivir en la Eternidad bienaventurada de DIOS.
Con Él, en Él y por Él, se borran todas las demás religiones porque, viene esta Luz al Mundo que ya alumbra la entrada de Jerusalén Celeste que desciende del Cielo sobre la Tierra de los Hombres llamados a adquirir sobre el paso del Reino de Dios, la “Identidad” de Aquel por quien la VERDADERA VIDA en DIOS se nos ha sido dada, sobre Su Santa Cruz de Amor.
Por Su Sufrimiento, por Su Santa Muerte y por Su Santa Resurrección, todos nosotros nos hacemos, "Los hijos del Reino".
Jesús Cristo es nuestro camino. Es la puerta y la llave del Reino. ¿"A quien iríamos"? Es por eso que, a "algunos metros", para emplear la misma fórmula, todos ustedes pueden decir: “Pronto, Jesús vuelve”.
No tenemos el derecho a esconder “la última locura de Satanás”, el conquistador decepcionado y avergonzado que, loco de rabia, viene para poner el "desorden" con los cultos antiguos que suscitan una curiosidad divertida en la muchedumbre. Todo esto, para distraerles de lo primordial:
Jesús vino, de una vez para siempre,
en nombre de DIOS el Eterno, Nuestro Padre de los Cielos,
informarles, por SU CRUZ DE AMOR,
que en lo sucesivo, la tierra entera
es una Tierra Divina
de la única Creación del Padre,
Tierra conquistada por la Obediencia,
la Fe, el Sufrimiento,
la Muerte y la Resurrección del Hijo único de DIOS, Jesucristo,
nacido del Padre, antes de todos los siglos.
La tierra, el Planeta Azul, no es una Tierra laica, ni de alguna otra atribución. Es una Tierra altamente conquistada a DIOS por el Sufrimiento y la Muerte de Jesús el Cristo, el Hijo único de DIOS.
Ninguna lucha, ninguna guerra triunfará sobre esta Tierra bendecida por la Sangre y la CRUZ de Cristo Jesús.
Esta nueva curiosidad que Satanás aporta, tanto en los países de Oriente como en los de Occidente, solo puede venir del enemigo de DIOS y de los hombres. Pero, los Ángeles del Señor velan.
Tengan cuidado al desacuerdo que puede crearse entre hermanos. No se dejen desanimar, porque son, de verdad, las últimas luchas de Satanás.
Rueguen a DIOS que les ilumine. Nosotros estamos con ustedes
JESÚS, MARÍA, Y JOSE.
Los tres Corazones Santos y Unidos del Cielo y de la Tierra. Amen.
Amen.
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